Sobre el canon a las bibliotecas
Escrito por José Manuel el miércoles, 28 de febrero de 2007 a las 7:40 am
La unión europea lleva años intentando que España haga pagar un canon a la gente que saque libros de las bibliotecas. Se trata de una norma comunitaria que está implantada en todos sus países miembros salvo en 4 (Bélgica, Luxemburgo, Portugal y España).
Su objetivo es el de revertir ese dinero en las sociedades de gestión de derechos de los autores para promover la creación de estos al dotarles con más dinero.
La primera consencuencia es clara: esta medida provocaría un descenso seguro en el consumo de cultura.
Mucha menos gente acudiría a las bibliotecas a llevarse libros. Si ahondamos más podemos ver muchas más consecuencias:
En España el hábito de lectura es pequeño y aplicar esta medida significaría reducirlo aún más.
Habría menos escritores: Muchos autores llegan a serlo como consecuencia de años de lecturas, en muchos casos imposibles sin las actuales bibliotecas.
La difusión de las obras sería menor: Las bibliotecas son una plataforma para dar a conocer a escritores. Mantienen obras descatalogadas que ya no se pueden encontrar en el mercado. Realizan diversas actividades de promoción. En las bibliotecas no se sigue las normas del mercado sino que se guían por un interés cultural.
Los autores perderían dinero al vender menos. No es cierto pensar que los autores están perdiendo dinero con las bibliotecas. Estas pagan un canón de derechos. Un canon que es de 30 veces si el libro va destinado a clubes de lectura. Y hay un dato muy significativo en las librerias cercanas a bibliotecas las ventas de libros son siempre mayores y disponen de clientelas fieles. El hábito de leer aumenta leyendo.
Los autores nunca serán los más beneficiados. Serían los máximos beneficiados los autores. Seguramente no. Las editoriales pagarían menos canon y las sociedades intermediarias de gestión se quedarían un buen pellizco.
Uno podría pensar que el dinero recaudado iría a parar a las bibliotecas pero de aprobarse la medida este no iría a parar aquí para aumentar sus catálogos. Con esta medida están alejando a mucha gente joven de las bibliotecas cuyo poder adquisitivo es pequeño y suele tener otras preferencias antes que la cultura.
Alejar la cultura de la gente pobre y de los jovenes es un gigantesco error. Por muchos autores millonarios (o no) que se creen. Toda la sociedad saldría perdiendo.
Si esta es la Europa que nos venden que no cuenten conmigo. La Europa que yo quería no era un lugar despiadado y egoista. La constitución europea que presentaron fue el primer aviso negativo. Lo de los libros no viene a ser más que otro detalle. Detalles que hacen que no quiera formar parte de eso llamado Europa.